La Suspensión de Helyeh Doutaghi en Yale: Un Caso de Censura Algorítmica y Desinformación
En la era de la inteligencia artificial, la información circula más rápido que nunca, pero también lo hacen la desinformación y las decisiones injustas basadas en algoritmos. Un ejemplo alarmante de esto es la reciente suspensión de Helyeh Doutaghi, académica de derecho internacional en Yale, quien fue puesta en licencia administrativa y expulsada del campus tras ser blanco de acusaciones generadas por una plataforma de extrema derecha impulsada por IA, tal como informó futurism.com.
¿Quién es Helyeh Doutaghi y por qué fue suspendida?
Doutaghi, una reconocida defensora de los derechos palestinos, comenzó a trabajar como subdirectora del proyecto de Derecho y Economía Política de Yale en 2023. Sin embargo, su carrera se vio interrumpida cuando la universidad decidió apartarla debido a acusaciones de «terrorismo» difundidas por el blog Jewish Onliner, una página autodenominada «potenciada por inteligencia artificial».
La plataforma, según investigaciones del periódico israelí Haaretz, ha estado vinculada a campañas de desinformación organizadas desde Israel, empleando bots de inteligencia artificial para acosar y difamar a usuarios con opiniones contrarias a su agenda. En este caso, el blog utilizó un modelo de lenguaje para amplificar acusaciones sin fundamento contra Doutaghi, lo que derivó en su suspensión.

El peligro de la censura algorítmica
Este caso expone un problema grave en el uso de IA en la moderación de contenido y la toma de decisiones en instituciones públicas y privadas. En muchos espacios, desde universidades hasta redes sociales, la automatización está reemplazando el análisis humano, llevando a sanciones injustificadas basadas en algoritmos defectuosos o manipulables.
A lo largo de los últimos años, hemos visto cómo grandes plataformas como Facebook y X (Twitter) han suspendido cuentas, bloqueado contenido y reducido el alcance de publicaciones debido a errores de moderación automática. El problema es que estos sistemas, lejos de ser objetivos, pueden amplificar sesgos y ser utilizados como armas de censura digital.
Desinformación impulsada por IA: una nueva herramienta de difamación
La inteligencia artificial ha abierto la puerta a nuevas formas de manipular la opinión pública. Páginas como Jewish Onliner emplean modelos de lenguaje grandes (LLM) para generar contenido persuasivo y aparentemente creíble, difundiéndolo de manera masiva con el objetivo de desacreditar a figuras políticas y académicas.
Lo preocupante es que este tipo de tecnología permite la creación de narrativas falsas con una rapidez y eficiencia sin precedentes. Anteriormente, una campaña de difamación requería una red de personas coordinadas; hoy, un solo usuario puede emplear IA para generar miles de mensajes y publicaciones automatizadas que parecen provenir de diferentes fuentes.
Conclusión: La IA como herramienta de control y resistencia
El caso de Helyeh Doutaghi no es solo una historia de injusticia individual, sino una advertencia sobre el impacto de la IA en la sociedad. Mientras que los modelos de lenguaje pueden ser herramientas poderosas para la investigación y la comunicación, también pueden ser usados para la censura, la difamación y la manipulación de la información.
Es fundamental que las instituciones adopten mecanismos de verificación humana y transparencia en el uso de IA para evitar que errores algorítmicos determinen el destino de personas inocentes. Asimismo, la sociedad debe ser consciente de cómo estas tecnologías pueden ser utilizadas para el control de narrativas, y cómo pueden, al mismo tiempo, convertirse en herramientas de resistencia frente a la desinformación.
Mientras las universidades, las redes sociales y las corporaciones sigan confiando en IA sin mecanismos de supervisión adecuados, casos como el de Doutaghi seguirán repitiéndose, poniendo en riesgo la libertad de expresión y el derecho a la información veraz.
