En lo profundo de los bosques de Karelia, al norte de Rusia, existe un lugar que parece sacado de una pesadilla. Se trata de la meseta de Vottovaara, una región envuelta en un aura de misterio y leyenda. Allí, enormes megalitos y extrañas formaciones rocosas se alzan de manera inexplicable, como si una fuerza desconocida hubiera moldeado el paisaje con propósitos insondables. Algunas piedras están perfectamente equilibradas sobre otras, desafiando la gravedad, mientras que otras parecen haber sido cortadas con precisión imposible para la tecnología de la antigüedad.
Pero el enigma de Vottovaara va más allá de su geología única. Durante la Segunda Guerra Mundial, los nazis del Tercer Reich se obsesionaron con este lugar. En su incansable búsqueda de reliquias, poderes ocultos y secretos esotéricos, los agentes de la Ahnenerbe —la organización nazi dedicada a la investigación de lo paranormal— llegaron hasta Karelia con un propósito inquietante: encontrar a una enigmática bruja llamada Miron Aku.

¿Era Vottovaara un antiguo centro ceremonial chamánico? ¿Esconde vestigios de una civilización perdida? ¿O acaso las extrañas estructuras de piedra son producto de fenómenos geológicos desconocidos? Sumérgete en este viaje a través de la historia, la mitología y lo inexplicable mientras exploramos los secretos de Vottovaara y su conexión con lo oculto.
En todo el mundo existen intrigantes estructuras, que los geólogos las consideran como formaciones naturales, sin embargo despiertan asombro por su apariencia intrigante y enigmática. Cada vez más personas se preguntan si algunos de estos lugares ¿no podrían ser los vestigios de civilizaciones prehistóricas remotas y desconocidas? Después de todo, ¿quien puede saber con certeza qué ocurrió hace millones de años? Los procesos de descomposición a lo largo del tiempo son relativamente predecibles. Por ejemplo, un automóvil abandonado a la intemperie puede transformarse en un montículo de tierra ferrosa en un período de tan solo 1000 años debido a procesos naturales como la oxidación y la erosión.
En Karelia, Rusia, se encuentra la montaña Votovaara, conocida como la montaña de las piedras. Este lugar presenta formaciones rocosas misteriosas, que los geólogos afirman que son naturales, hay gente que se pregunta si este lugar no pudiera esconder un posible pasado de una civilización prehistórica. Entre sus características se encuentran formaciones rocosas inusuales, enormes piedras en equilibrio, megalitos cortados geométricamente y petroglifos intrigantes.

En la cima de la montaña, hay piedras que lucen como si hubieran sido cortadas artificialmente, similares a losas. Entre ellas se destaca una gran roca conocida como la «escalera al cielo», que parece formar parte de antiguas escaleras. Estas piedras están desgastadas y erosionadas, como si hubieran sido afectadas por cataclismos y terremotos.
Karelia un área de interés para el 3er Reich
Además por otro lado, Durante la Segunda Guerra Mundial, Karelia fue de interés estratégico tanto para Alemania como para la Unión Soviética debido a su ubicación y recursos naturales. Sin embargo, además de los intereses militares, también hubo expediciones arqueológicas, culturales , esotéricas y paranormales realizadas por los alemanes. La Ahnenerbe, una organización dedicada a la investigación de la prehistoria y la herencia cultural germánica, mostró un particular interés en la región. Su objetivo era descubrir rituales e invocaciones ancestrales llevadas a cabo por chamanes y brujos del noroeste de Rusia, que desde su perspectiva, habían permanecido lejos del contacto con la civilización durante siglos y no estaban influenciados por la iglesia católica.
La historia de Yrjö von Grönhagen y la bruja Miron Aku
Por esta razón, Yrjö von Grönhagen y su equipo fueron enviados por el propio Heinrich Himmler, y se trasladaron a Karelia en busca de estos chamanes nórdicos y el conocimiento oculto que estos poseían.
Así fue como finalmente trás investigar y permanecer meses en Karelia en busca de estos chamanes, llegaron a la conclusión de que, en la Karelia finlandesa se encontraba una bruja llamada Miron Aku, que conocía los rituales ancestrales que los germanos anhelaban aprender.

La mujer recibió a Von Gronhagen diciendole viniste a mi mientras dormía para intentar robar missecretos, En los espesos bosques de Salmi, el equipo de la expedición descubrió a una anciana de noventa y dos años llamada Miron-Aku, una especie de hechicera local que vivía como una ermitaña. La mujer recibió a Von Gronhagen diciendole viniste a mi mientras dormía para intentar robar mis secretos, la cosa no serían facil para Von Gronaghen, pero Tras ganarse su confianza, Grönhagen visitó a la mujer en su choza durante varias jornadas. Miron-Aku le habló de un antiguo dios anterior al cristianismo, un dios germánico, y confesó su capacidad para conjurar a los espíritus de sus antepasados, quienes residían con ella en su choza y le permitían adivinar acontecimientos futuros.

Recitaba extraños conjuros e invocaba a poderosos espíritus en presencia de los visitantes, quienes lucían discretamente sus emblemas y runas.
La señora ni siquiera sabía lo que era una grabadora magnetofónica. Finalmente, sin su consentimiento o plena comprensión de los hechos, los alemanes lograron grabar su voz y registrar su ceremonia y ritual de invocación a los espíritus ancestrales. Sin embargo, la anciana quedó consternada y defraudada cuando le hicieron escuchar la grabación. Indignada, se sintió completamente estafada por los alemanes y juró abandonar la magia y nunca volver a confiar en nadie.

Antiguos habitantes de conocimientos misteriosos
Pero por razón fue esta gente a esa area, no solo porque está muy aislada del resto del mundo, y hace 80 años quizás aún tenían poco contacto con las áreas mas civilizadas, sino porque es un area de veneración ancestral. Allí vivían los Saami un antiguo pueblo de Laponia tal como se conocía a Karelia en la antiguedad. Antes de la cristianización, los Saami practicaban una religión animista, con creencias en numerosos espíritus y dioses relacionados con la naturaleza. Hoy en día, muchos saami son cristianos, pero algunos elementos de su espiritualidad tradicional todavía persisten..
En el area de Vottovaara hay unos misteriosos petroglifos que no se sabe a ciencia cierta quien los hizo ni tampoco que antigüedad tienen, En uno En la parte superior se pueden ver lo que parecen ser varias figuras alineadas, lo que sugiere la idea de personas de pie o en movimiento, sobre un barco o plataforma, otros representan animales y otro gente esquiando o cazando en esquíes y se cree que podrían tener miles de años estos petroglifos.
Hay muchas rocas dispuestas de una manera muy extraña tampoco se sabe quienes las colocaron de esta manera, se cree que pudieron ser los Saami, un pueblo de Laponia como se conocía antiguamente a Vottovaara, hay bloques de piedra como si hubieran sido cortados, hay una roca con forma de pirámide, se ven fomraciones naturales muy curiosas, plataformas lisas inclinadas, esferas en equilibrio, y otras grandes piedras puestas en equilibrio, están las misteriosas escaleras, hay un circulo de piedras que tampoco se sabe quienes lo crearon, enormes losas con marcas muy extrañas, piletones naturales.

La montaña Vottovaara es un lugar sagrado para el antiguo pueblo Saami. Aproximadamente 1600 piedras sagradas llamadas «seids» están dispuestas aquí en un orden misterioso. Los geologos piensan que hace nueve mil años hubo un gran terremoto en la zona, junto con actividad tectónica y glacial.
Los Seids o Seitas son objetos o lugares venerados por el pueblo saami como representantes de la naturaleza o de los espíritus de la tierra. Se encuentran por toda la región que antes se llamaba Laponia (hoy Karelia, Rusia) y fueron construidos y venerados en el pasado lejano por los antepasados precristianos de los Saami. Pueden adoptar muchas formas, incluidas construcciones de madera o simplemente estanques o valles apartados. En este caso, la palabra se refiere a las piedras Seid, que son piedras o cantos rodados, a menudo de formas inusuales o colocadas de formas inusuales. Estos son los megalitos de los antiguos pueblos del norte.

Además de los enigmáticos megalitos, las personas supersticiosas creen que el lugar es el epicentro de fuerzas malignas y un portal hacia otros mundo u otras dimensiones, debido a los fenómenos anómalos que allí se observan.. Otro hecho sumamente curioso es que casi no hay fauna, a los animales no les gusta el lugar, y muchos árboles son poco atractivos, y parecieran no tener vida crecen de manera muy singular, no se sabe porque pero algunos tiene unos 125 años y no miden mas de 2 metros, no tienen hojas, y crecen de una forma muy rara, en ciertos caso hacia abajo. Además, los lagos parecen estar muertos. Por su extraño estado que infunde espanto, ha recibido el apodo de «Montaña de la Muerte».
Para los defensores de diversas corrientes místicas, la Montaña de la Muerte es vista como un umbral hacia el otro mundo y el centro de energías oscuras, lo que la convierte en un destino popular para los peregrinos. En la ladera de la montaña, se encuentran terrazas de piedra cubiertas de musgo, abetos y pinos con restos de incendios forestales y talas antiguas esparcidos por doquier.

Aunque los geólogos y en particular Sergey Simonyan, un investigador local del pueblo de Sukkozero, reconoció la posibilidad de que los seids, los extraños megalitos tuvieran un origen antropogénico en Vottovaara, es decir una participación humana en la disposición de algunos megalitos, y descartó la presencia de fenómenos esotéricos y místicos. Aún así Mucha gente, turistas de Rusia y otras partes, en la región de Karelia, se preguntan, si estos megalitos y esta intrigante energía no podrá tener un origen eljos en el tiempo en una civiliacion perdida y desconocida, con cuyos espiritus ancestrales Yrjö von Grönhagen y su equipo querían establecer contacto.
